Escrito por: Larissa López
Intentar
rebajar de peso y tratar de llevar una alimentación saludable es difícil, pero
no imposible.
Muchas veces, pensamos que con solo el hecho de practicar algún
tipo de deporte o llevar una rutina de ejercicios será suficiente para bajar de
peso, sin embargo, es necesario llevar también una buena alimentación de la
mano. Solo se requiere de la motivación y perseverancia si realmente estamos
buscando buenos resultados.
Para
esto, traemos algunas recomendaciones si buscas bajar de peso pero aún no lo
has logrado. En este caso, entre los alimentos de debes de evitar a toda costa si quieres bajar de peso son:
Las gaseosas normales o dietéticas: si diariamente reemplazas una botella de gaseosa de 20
oz con un vaso de agua seguramente podrías bajar hasta 35 libras en un año. Sin
embargo, muchas personas son adictas a esa bebida refrescante, por lo que te
recomendamos evitarla a toda costa.
El café: puedes tomar un quemador natural de grasa como un té
verde, porque el café provoca aumentar el nivel de estrés y por consiguiente, producirás
más grasa en tu cuerpo. También, el café causa el aumento de apetito al hacer
que comas más de lo normal. Por lo tanto, te recomendamos consumir té verde si
deseas bajar de peso más fácilmente.
El alcohol: por lo regular, esta bebida contiene alimentos naturales que
la convierte en una bebida concentrada de azúcar que provocará que subas de
peso de manera rápida.
Las golosinas y bocadillos: debes evitar a toda costa las papas fritas, palomitas de
maíz, galletas, dulces, helados, chocolates, tortas, entre otros, que lo único que causarán
es que quieras comer más.
Disminuir el consumo de sal y azúcar: el consumo excesivo de estos elementos harán que ganes
peso de agua, lo cual te hará ver más gordo de lo que realmente eres.
Alimentos procesados: lo único que provocará es que remuevas todas las cosas
buenas que te ayudan a perder peso y las reemplazará, con cosas como el azúcar,
jarabe de maíz y aceites hidrogenados, que harán que aumentes de peso.
El azúcar: evítalo lo más que puedas, debido a que es la fuente
principal de carbohidratos, además del jarabe de maíz y los aceites
hidrogenados.
Los multigranos: si bien parece un término bastante elegante, lo único que
cambia es que son carbohidratos pero procesados. Por lo tanto, te recomendamos
solo escoger los de grano integral.
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